En la alegría y en la acción de gracias
vivimos la vocación de ser discípulas del Señor
como un don siempre nuevo para compartir.
(Cfr. RV 48)
Las hermanas que, en este Año Vocacional de la Familia Paulina, celebran el jubileo de consagración religiosa nos comparten su testimonio de vida.
La lectura de estos testimonios nos impulse a reavivar el don de la Vocación que el Señor nos ha regalado y a continuar correspondiendo a su Proyecto de amor con todas nuestras fuerzas, anunciándolo como Camino, Veridad y Vida.
