El 8º Capítulo general se celebra en Roma, en la casa Betania, en la vía Portuense 741, del 19 de marzo al 16 de abril de 2011, A distancia de 64 años, las Pías Discípulas del Divino Maestro regresan al lugar donde se celebró el primer Capítulo general.
El tema de nuestro 8º Capítulo general es: Pan partido y compartido para la vida del mundo.
Objetivo general: Hacerse discípulas de Jesús Maestro en la corresponsabilidad, en la comunión y en el servicio.
Objetivos específicos: En la escuela de la Eucaristía:
- Tomar conciencia del fenómeno de la globalización en su integralidad y de la crisis como contexto de nuestra vida y misión;
- Reavivar los valores de la pobreza paulina en sus funciones específicas;
- Formarse al compartir como exigencia de una fe madura y de una caridad activa para contribuir, según los recursos respectivos, a una comunión de los bienes efectiva, con vistas a la misión.
Las hermanas capitulares escriben en el Mensaje Final: “En este 8º Capítulo general, como hicieron el Padre Alberione y Madre M. Escolástica en el pasado, hemos querido dar una mirada contemplativa al mundo y a nuestra Congregación para captar las bendiciones y los desafíos en ellos presentes. Hemos vivido juntas la experiencia eucarística del Beato Santiago Alberione. Él, a los 16 años, “en respuesta a la invitación evangélica: «Venid a mí todos vosotros», se siente obligado a prepararse para hacer algo por el Señor y por la humanidad de su tiempo, unificando todo en Cristo Camino, Verdad y Vida”.
El desarrollo de las cuatro etapas previstas por el cronograma capitular nos implicó progresivamente en la corresponsabilidad y en el compartir, haciendo saborear la belleza y la fatiga de la realidad cultural de las 31 naciones en las que, como Pías Discípulas del Divino Maestro, estamos presentes en los cinco continentes. En las intervenciones en la asamblea se sintió vibrar la atención a las Circunscripciones y a todas vosotras, hermanas, de las diversas culturas de las que provenimos. La discusión sobre prioridad, líneas operativas, mociones nos ha confirmado que pertenecemos a una Congregación viva, un cuerpo formado por miembros sanos, vivos y dinámicos. Por don de Dios, somos una familia religiosa que, con esperanza, se abre al futuro”.
“La asamblea capitular elige Superiora general a Sor M. Regina Cesarato, para el segundo mandato. Son elegidas cinco consejeras: Sor M. Micaela Monetti (re-elegida), Sor M. Celina Cunha (re-elegida), Sor M. Leticia Bantalinao (Provincia Filipinas-Taiwan-Hong Kong), Sor Ana María Mazzurana (delegación Argentina), Sor M. Anetta Szczykutowicz (delegación África).
Más tarde, el superior general, con el consentimiento de su consejo, designó a la Hna. M. Lidia Awoki como secretaria general, y reconfirmó al Sr. M. Agar Coreno como tesorero general.
nti.